No quería irme a dormir sin dedicarte las mejores palabras. ¿Por qué?. Por lo de siempre. Porque no dejo de agradecer al destino que hoy, después de soñar tantos años, estés aquí sentada a mi lado.
Que desde que estoy contigo, has conseguido sacar lo mejor que tenía en mi interior. Jamás me ha faltado tu apoyo para ninguna de mis ideas por muy descabellada o infantil que pudiera ser.
Solo deseo corresponderte a todo lo que me das. Eso sí, te lo devolveré poco a poco, para que dure toda la vida y aún así estaré en deuda contigo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario